Dentro de los actos religiosos, organizados por la Junta de Hermandades para el Viernes de Dolores, se ha celebrado un solemne Triduo en la iglesia de Santa María Madre de Dios, y que ha sido oficiado por el párroco D. Pedro José González Rodenas y auxiliado por el Diácono Saúl Muñoz. En esta ceremonia religiosa han estado presentes, el primer teniente de alcalde Bernardo Ortega junto a miembros de la corporación municipal, el presidente de la Junta de Hermandades Ignacio Arnau, así como gran cantidad de feligreses. Al finalizar la misa se ha realizado un devoto besamanos ante la imagen de Nuestra Señora de los Dolores.
A continuación, el Sr. Obispo de la Diócesis de Albacete D. Ángel Fernández, máxima autoridad religiosa de la provincia, ha dirigido el Vía Crucis que, recorrido varias calles de la localidad, ha completado las estaciones penitenciales finalizando con la entrada de la Virgen de los Dolores en la ermita de la Soledad.