Una extraordinaria colección de capillas y retablos adornan estos días el claustro del Ayuntamiento hasta el día 17 abril.
El creador de estas originales obras , acompañado por el concejal de cultura Bernardo Ortega y distintos miembros de la corporación municipal abrieron esta exposición que podrá disfrutar el público de lunes a sábado de 19:00 a 21:00 horas y domingos y festivos de 12:00 a 14:00 horas.
Juan Manuel nació en 1944 en Villarrobledo, como gran parte de su generación, marchó a Levante en la década de los 60 para aprender un oficio, el de Juan Manuel fue de Talla artística y decorativa en escayola. Comenzó como aprendiz del Maestro Fallero José Villadach, trabajando de noche como ayudante en la talla en la «Ciudad Fallera de Valencia», recién inaugurada por Salvador Dalí. Su carrera profesional fue creciendo gracias a su destreza con la talla y modelaje de la escayola, realmente convertida en su pasión.
En la década de los 80 se estableció en Alicante, de ahí viajó y trabajó por todo el mundo, recuerda con especial aprecio las obras llevadas a cabo en los Palacios del Rey Fahd bin Abdulaziz, de Arabia Saudita, y la Casa Presidencial en Damasco, Siria. En lo trabajos posteriores en España se encuentran Hospitales Privados, Hoteles importantísimos de la Costa y las Islas, como el Hotel Palm Beach (Benidorm), Hotel Papagayo Arena (Lanzarote), Hotel El Greco (Ibiza) entre muchos otros.
«Podríamos decir que hay trabajos de Juan Manuel López Ramos en cualquier parte del mundo» A principios de los 2000 regresó a su pueblo, ya convertido en Maestro, donde tuvo de aprendices a la que ha sido la cantera de escayolistas de Villarrobledo, y que seguro perdurará varias generaciones. En la Jubilación encontró el tiempo para dedicar su talento al Arte Sacro del que tanto aprendió en los lugares que admiró. Especialmente las Capillas, los Retablos Renacentistas y Puertas Pías, inspiradas en Iglesias y Conventos de Italia donde quedó fascinado. Su obra en esta exposición está compuesta de Tallas en escayola a pequeña escala, de Capillas en honor a Santos como San Nicolás, San Blas o a la Virgen de la Caridad de Villarrobledo. Combinando técnicas de escayola para su acabado, como la policromía y pan de oro para sus ornamentos, interpretando las obras originales, así atribuyendo su emoción a cada pieza, y a cada molde creado, durante toda su inmensa trayectoria.








